Las medusas nomura (Nemopilema nomurai) viven en las aguas entre China, Japón y Corea del Sur, estas pueden crecer hasta alcanzar los 2 metros de diámetro y pesar 200 kilogramos. El veneno de sus tentáculos no es mortal para los humanos aunque está causando daños muy severos estas inmensas medusas han surgido de la nada y por si fuese poco cada vez que matan a uno de estos ejemplares aparecen muchos más lo cual ha preocupado tanto a los gobiernos como a los pobladores de China, Japón y Corea del Sur. Estos ejércitos multitudinarios de horripilantes bichos babosos han acabado con el abastecimiento del principal alimento del país. El problema se ha convertido en algo tan grave como para que los responsables gubernamentales de pesca de Japón, China y Corea del Sur se hayan reunido en la denominada "Cumbre de la medusa" para analizar posibles estrategias con las que hacer frente a la invasión. El Partido Liberal Democrático, que gobierna en Japón, ha constituido un comité de medidas contra las medusas y los pescadores se han puesto a trabajar en tecnologías para mantener a estos depredadores lejos de sus redes.
Entre agosto y diciembre de 2005 la concentración de estos animales aumentó drásticamente sin una explicación evidente. En algunas zonas del Mar de Japón el aumento fue cien veces superior al normal lo que perjudicó gravemente a los pescadores de la zona. Aunque se ha especulado con diversas causas para explicar el origen de este fenómeno, aún no se ha encontrado una explicación definitiva. y han surgido de la nada en grandes cantidades para aterrorizar al pueblo japonés. Estos ejércitos multitudinarios de horripilantes bichos babosos han acabado con el abastecimiento del principal alimento del país.